nellcote

Son las cuatro de la mañana y no encuentro otro consuelo en el insomnio que un cigarro, tumbling dice del directo del 72, ver la grabación de sympathy for the devil, me encanta ver a los stones en el studio, y escribir. Escribir sin sentido, escribir por escribir, escribir porqué son las cuatro de la mañana y no se me ocurre otra cosa mejor que hacer aparte de tocar, pero no quiero despertar a todo el vecindario con la telecaster, hoy por lo menos, no. 


Pasa el tiempo y no se me ocurre nada que poner, son ya las cuatro y veinte y yo sigo en la oscuridad, con la sola luz del ordenador reflexionando miles de cosas, soñando despierto, esto es culpa de Life, la biografía de Keith, libro al que recurro cuando no puedo dormir, hoy tocaba el capítulo de Exile con la preciosa foto de Keith y Gram abriendo el capítulo. Leo las historias de grabar un álbum en un mugriento sótano de la costa azul francesa,coger una lancha para ir a Mónaco, Italia... El despertarse a las cuatro de la tarde y hacer rock and roll hasta las seis de la mañana, improvisar con todo el grupo hasta que surge sin avisar como un ciclón, que Bobby Keys aparezca con un taladrador solo de saxo, que Mick Taylor le de ese toque de a las canciones con sus solos, la telecaster de Keith en afinación abierta para Happy, All down the line, Rocks Off, Tumbling Dice, el vivir con todo un grupo de personas sexo que les mueve lo mismo, drogas y muchísimo rock and roll, como se ve en las dos fotos... De eso iba la vida en Nellcote,La dolce vita!, donde se hizo mi disco preferido, el mejor disco de la historia del rock, porqué tiene rock and roll, country,soul, blues, corazón lo tiene todo.